El Granada no sabe cómo ganar (y otros récords negativos)

El Granada está viviendo su peor campaña desde que retornó a la máxima categoría por última vez. El conjunto andaluz acumula 10 jornadas sin conocer la victoria, una racha que le ha dejado anclado en la última posición de LaLiga Santander y que dificultará sus posibilidades de permanencia. La mala conexión con Paco Jémez provocó un aluvión de malos resultados y goles encajados, y la llegada de Lucas Alcaraz ha servido para que, al menos, las sensaciones mejoren, aunque los resultados no están acompañando.

El Granada iguala a equipos como Levante o Racing de Santander

Si miramos la estadística, encontramos otros equipos que tampoco fueron capaces de lograr la victoria tras la disputa de las primeras diez jornadas del campeonato liguero. El caso más reciente es el del Almería en la temporada 2013/14, y para consuelo del conjunto nazarí, hay que remarcar que sus vecinos andaluces finalmente fueron capaces de salvar la categoría, al igual que sucedió con el Sabadell en la 86/87 y el Málaga en la 67/68.

Por contra, también encontramos equipos que no fueron capaces de reponerse ante un inicio tan devastador. El Racing de Santander perdió la categoría hace cuatro temporadas, una época muy convulsa que les llevó hasta los campos de 2ºB en años posteriores, mientras que el Levante ha ido sumando ascensos y descensos continuos, pero nunca con inicios tan catastróficos como el registrado en la campaña 2007/08.

Sporting y Logroñés, las peores rachas

Eso sí, los diez partidos sin conocer la victoria todavía quedan muy lejos de las peores rachas firmadas en nuestro campeonato regular. La marca de 23 partidos del Sporting de Gijón en la temporada 1997/98 todavía permanece inamovible, una campaña en la que los asturianos estaban abocados al descenso prácticamente en el mes de diciembre. Miguel Ángel Montes, Antonio Maceda, Díaz Novoa y José Antonio Redondo fueron los entrenadores de aquel Sporting, y ninguno de ellos pudo ofrecer la estabilidad necesaria para mantener al equipo en Primera con una plantilla en la que destacaban jugadores como Ablanedo, Nikiforov, Trotta o Cheryshev.

La siguiente racha negativa tiene como triste protagonista al Logroñés de la temporada 1994/95. El conjunto riojano ya dejó entrever el desastre en verano con una política de fichajes de cuestionable calidad, y esas dudas se manifestaron con un lapso de 17 partidos sin amarrar una sola victoria, lo que supuso la destitución de Blagoje Paunovic y Fabri González. El tercer técnico durante aquella temporada, José Augusto Pinto de Almeida, fue quien consiguió colocar el primer triunfo en el casillero, aunque tampoco tuvo la oportunidad de seguir peleando por la permanencia, ya que después de él también llegarían a Las Gaunas Antonio Ruiz Cervilla y Rubén Galilea antes de consumarse el descenso. Ochotorena, Gudelj y José Ignacio fueron de los pocos jugadores destacables de una plantilla en la que el más recordado siempre será Atila Kasac, y no precisamente por sus aptitudes futbolísticas...